Abuelos a jornada completa


Los abuelos siempre suponen una ayuda a la hora de cuidar de los hijos, sobre todo cuando se da el caso, hoy mayoría, de que son los dos padres que trabajan y no pueden compaginar sus horarios con los de sus hijos. Pero cada vez es más común que esta ayuda desinteresada acabe convirtiéndose en un auténtico trabajo.

Poder contar con los abuelos para cuidar de los hijos es una auténtica bendición: No tienen problemas de horario al estar jubilados, por lo que siempre podrán ir a dónde sea y cuando sea; no cobran nada  y  lo mejor de todo, lo hacen encantados, pues ello les permite pasar más tiempo con sus nietos. Sin embargo, como bien dice el dicho, en ocasiones va tanto el cántaro a la fuente que éste acaba rompiéndose. Y es que en muchas ocasiones parece olvidarse que los mayores han pasado la mayor parte de su vida trabajando para que, cuando llega la tan esperada jubilación, se ven con nuevas responsabilidades a su cargo. Responsabilidades que hacen de mil amores, cierto es, pero responsabilidades al fin y al cabo.
TODO POR LOS HIJOS
Ana tiene la inmensa fortuna de tener tres nietos. El mayor llegó hace 5 años y,  aprovechando que era costurera y que trabajaba en casa, no le importó en absoluto que su hijo, antes de ir a trabajar, le dejara a su nieto en casa para que estuviera con los abuelos hasta que les recogiera de nuevo por la tarde. 
Al cabo de un par de años su hijo mediano hizo lo mismo con su segundo nieto, y ahora no puede ni quiere decir que no hará lo mismo por Pablo, el hijo de Rosa, su hija más pequeña.

De este modo, cada mañana, la otrora casa vacía se llena de risas y llantos durante buena parte del día. “Lo hago encantada – comenta al preguntarle por todas las tareas que ha vuelto a realizar tras casi décadas – Tener niñas en casa hace que te sientas más alegre, que tengas la oportunidad de volver a experimentar el ser una madre. Cierto que en ocasiones mi maltrecha espalda se resiente, pero mis hijos me están muy agradecidos y, al menos una vez al año, me recompensan invitándome un fin de semana a un SPA”.

María, de 75 años, se ha encargado casi en solitario de ayudar de su nieto pequeño, Iván, hasta bien entrado en la adolescencia. Iván, que ahora tiene 15 años, de pequeño sí que iba a la guardería pero, por las tardes, al llegar sus padres muy tarde a casa, siempre las pasaba con su abuela. “Al principio todo iba muy bien, pues me encargaba de darle la merienda e incluso preparar la cena para todos – dice – Pero cuando se fue haciendo mayor veía que no podía ayudarle con otras cosas como los deberes- Casi no sé escribir, por lo que todas esas cuentas y ejercicios que tenía que hacer, incluso en inglés, no las entendía” Por ello sólo podía quedarse con él y confiar en que hiciera los deberes lo mejor que pudiera, aunque en muchos casos acababa pasándose toda la tarde viendo la tele, y al día siguiente se enteraba de que no había entregado las tareas.

TODOS DEBEN OPINAR PARA PODER ENTENDERSE 
Son todos estos casos situaciones difíciles llenas de particularidades cada una. Lo idóneo sería que los niños pudieran pasar las tardes con sus padres y que fueran ellos quienes ayudaran a sus hijos con los deberes o simplemente estuvieran todos juntos buena parte del día, para visitar luego a los abuelos,  atendiendo a las necesidades y horarios de estos últimos.
Pero esta situación tan idílica pocas veces puede conseguirse por múltiples motivos, el tiempo y la economía sin duda los más decisivos. Los abuelos harían cualquier cosa por sus nietos, al igual que hicieron antes por sus propios hijos. Pero mientras no se tengan en cuenta las opiniones de todas las partes: padres, abuelos y nietos; lo que comenzó siendo un favor desinteresado y lleno de cariño, puede acabar convirtiéndose en un auténtica jornada laboral que en la mayoría de los casos no está suficientemente recompensada. Porque sí, una sonrisa y un gracias son siempre bien recibidos, pero eso no es suficiente para llenar la nevera o aliviar el cansancio después de tantas horas en pie.

(Publicado en el Nº I de la Revista amiga " Zona Senior ")