EL AGUA, LA MIGRAÑA Y LA DEPRESIÓN

LA MIGRAÑA

La migraña también suele deberse a la deshidratación. Para él es un indicador de regulación crítica de la temperatura corporal. Es decir, es una dolencia que revela una especie de "estrés de calor". 
Un exceso de mantas en la cama que no dejan que el cuerpo regule su temperatura durante el sueño, bebidas alcohólicas que provocan deshidratación celular (particularmente en el cerebro), situaciones de alergia que hacen secretar histamina o un exceso de calor ambiental sin ingesta de agua son ejemplos típicos de ese "estrés de calor“. Algo que se evita con la simple ingesta regular de agua. Y, en este caso concreto, de agua fría que baje la temperatura del cuerpo y del cerebro desde el interior y promueva el cierre del sistema vascular periférico cuya dilatación, según Batmanghelidj, es la causa desencadenante de la migraña.


 LA DEPRESIÓN

Comúnmente se acepta que la depresión está asociada al estrés social, es decir, al temor, la ansiedad, la inseguridad, los problemas matrimoniales y emocionales persistentes. 
Para Batmanghelidj, sin embargo, la depresión (que no la tristeza, el decaimiento, etc.) es el resultado de una carencia de agua en el tejido cerebral. Aseveración que apoya explicando que el cerebro utiliza la energía eléctrica para funcionar y ésta se genera en el interior del cuerpo... merced precisamente a la circulación del agua. 
Consiguientemente, con la deshidratación el nivel de generación de energía disminuye, especialmente en el cerebro, por lo que muchas funciones cerebrales que dependen de ese tipo de energía se vuelven ineficaces. 
Y a esa "incompetencia de función" es a lo que Batmanghelidj achaca lo que llamamos "depresión". 
Agregando que ese estado depresivo causado por la deshidratación es también lo que suele llevar al llamado Síndrome de Fatiga Crónica, afección que no sería sino una etiqueta puesta sobre una serie de problemas fisiológicos avanzados que se hallan asociados al estrés y, por ende, a la deshidratación crónica.