La monja Teresa Forcades, doctora en Medicina y teóloga, defiende la urgencia de iniciar una "revolución pacífica y democrática" y está dispuesta a colaborar en una posible plataforma cívica que una los descontentos sociales para cambiar las políticas neoliberales de recortes, "que no son ajustes, sino medidas criminales".
Teresa Forcades acaba de publicar la versión en castellano de su libro "Diálogos con Teresa Forcades" (Ediciones Dau), escrito junto con la periodista Eulàlia Tort y que en su edición en catalán ha vendido ya más de 10.000 ejemplares.
En una entrevista con Efe, la monja benedictina, ha señalado que, aunque no tiene vocación política, está dispuesta a ayudar desde su ámbito religioso a la constitución de una posible plataforma cívica que vindique un cambio político y demuestre incluso electoralmente que hay alternativas a las políticas de recortes sociales.
Forcades ha apuntado que "hay una urgencia social y ahora es el momento de articular una alternativa pacífica y democrática. Soy consciente de la urgencia, pero también de las dificultades. Esto no se hace en un 'plis plas', pero espero que se pueda concretar en una iniciativa que se haga pública pronto".
"Como monja benedictina, la austeridad me gusta, la austeridad es una cosa positiva, pero otra cosa son las políticas que llaman de austeridad, que deberían encontrar otro nombre, porque son decisiones para dar dinero a los bancos antes que preocuparse por que coman todos los niños de Cataluña", ha dicho la religiosa.
"Yo a esto no le llamo medidas de austeridad sino medidas de criminalidad en contra de los derechos básicos de la gente", ha denunciado la monja, que ha recordado que en Cataluña "hay un 12 % de la población viviendo en la miseria, es decir personas que si no hacen cola en algún sitio que les den comida, no comen, sin contar otro 18 % de pobreza, de los que no llegan a final de mes".
Para Teresa Forcades, "que haya un 30 % de personas que lo pasan mal es un escándalo, y eso lo han provocado las medidas de austeridad, que para mí, insisto, son medidas criminales, contrarias a los derechos básicos".
"En España ha aumentado tanto la desigualdad que ya es el país de la UE con la tasa de desigualdad más alta", ha asegurado.
Según Forcades, las políticas que están aplicando tanto el gobierno catalán como el central "no son medidas de ajuste ni de austeridad, porque dinero hay, pero no lo reparten como antes, son medidas de precarización y de empobrecimiento de la población".
Tras denunciar que las parejas jóvenes con hijos están siendo las más castigadas por la crisis, Forcades atribuye a un "factor ideológico" el hecho de que, con 6 millones de parados, un índice de pobreza disparado y un aumento de los recortes sociales, no se haya producido ya un estallido social.
"A lo largo de la historia, se ha demostrado que los cañones y el miedo a la represión ejercida por una minoría no son suficientes para parar una revuelta social si no se da el factor ideológico de hacer creer a la población que no hay alternativa", ha argumentado.
"Yo creo que ahora puede que estemos dando la vuelta a esta alienación mental", ha confiado la monja, que se ha mostrado dispuesta a "ayudar a que esta revolución se dé, pero que sea pacífica y democrática, que no quiere decir que sea fácil".
"Me gustaría contribuir a este cambio, aunque no estoy dispuesta a cambiar mi vocación religiosa por una vocación política, pero sí, desde lo que soy, a ayudar a que esto sea una realidad, creo que es posible", ha sentenciado la monja, que alcanzó popularidad desde que se enfrentó a la industria farmacéutica en la crisis sanitaria de la gripe A. EFE